La relación entre la higiene de nuestra cavidad oral con la COVID-19
Con respecto al nuevo coronavirus, “hay estudios que sugieren que cuantos más virus se encuentren en la boca, más severa será la enfermedad Covid-19 en el paciente”. Hacemos un repaso a la importancia de la higiene en nuestra cavidad oral en tiempo de pandemia.
Este año 2020 ya sabemos que pasará a la historia por la lucha incansable desde todos los sectores que de una manera u otra pueden ayudar a remediar este mal global del SARS-CoV-2. Y si al menos por ahora no lo remedia, la ciencia empieza a probar estudios en los que ciertos comportamientos y productos de uso diarios pueden ayudarnos a reducir la carga vírica. Nos centraremos en este post en la estrecha relación de nuestra cavidad oral con la COVID-19
Es aquí donde relacionamos la higiene dental de nuestra boca con una menor carga viral. Cabe recordar que la COVID-19 encuentra en nuestra boca, nariz y ojos una de las principales vías de entrada a nuestro organismo. El virus encuentra una alta densidad de receptores en nuestra boca; y, además, las gotículas respiratorias que generamos en ella son una de las principales vías de contagio. La cavidad oral se podría comportar además como factor protector o agravante de la infección, algo que ya se ha visto con otras enfermedades.
Con respecto al nuevo coronavirus, “hay estudios que sugieren que cuantos más virus se encuentren en la boca, más severa será la enfermedad Covid-19 en el paciente”.
Por otra parte, aunque durante los primeros días de infección el paciente permanezca asintomático, sí puede contagiar el virus. Es más, durante ese tiempo hay una mayor acumulación de virus en las mucosas nasales, orales y faríngeas, que tardan un tiempo en pasar a los pulmones.
¿TAN IMPORTANTE ES LA HIGIENE BUCAL PARA PREVENIR LA COVID-19?
La respuesta es sí. Aunque remarcado la importancia de mantener una correcta higiene bucal a la hora de prevenir la Covid-19, comparando el uso de colutorios con cloruro de cetilpiridinio (CPC) con la acción de lavarse las manos para eliminar los virus.
“El uso de este tipo de colutorios no cura la enfermedad, pero podría ayudar a disminuir la carga viral en la boca y, en este sentido, tener un efecto preventivo, de forma temporal, en el contagio inmediato”.
El doctor Sanz, encargado de hablar de la estructura del virus y su activación en el organismo, resalta que todavía no existe evidencia de que tener la boca en salud ofrezca una capacidad preventiva mayor frente al virus.
Sin embargo, “si hacemos una transposición de lo que conocemos, sí podemos intuir que es importante tener la boca en salud para que, si este ingresa en nuestro organismo, tenga menos capacidad de afectarnos”.
Para evitar la propagación del virus durante la práctica odontológica, dado que se generan muchos aerosoles, se están utilizando enjuagues bucales, entre otras muchas medidas de seguridad.
“Varios estudios apuntan a que ciertos antisépticos presentes en algunos enjuagues bucales podrían ser capaces de degradar la envuelta lipídica de los coronavirus, consiguiendo reducir la carga viral en boca de pacientes infectados y, en consecuencia, ayudar a reducir la transmisión en consulta”.
Por esa razón, los protocolos de prevención recomiendan que el paciente utilice un colutorio durante 30 segundos con la finalidad de disminuir la carga viral antes de proceder a cualquier examen o tratamiento intraoral.
El doctor Herrera cita aquellos con peróxido de hidrógeno, clorhexidina, soluciones de povidona yodada o diluidocloruro de cetilpiridinio (CPC), mostrando su preferencia por estos dos últimos.
Aunque ha destacado que para poder validar sus beneficios “se hace necesario conocer los resultados de los estudios clínicos que se están realizando”.