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Con la llegada del verano, cambiamos nuestra rutina de cada día: viajes, fiestas, cenas, días de barbacoas, etc. unas merecidas vacaciones, donde toca relajarse y recargar pilas; pero no debemos descuidar nuestros hábitos de higiene bucodental. Por ello, este verano, te ayudamos a cuidar tus dientes con estos 6 sencillos consejos para cuidar de tu sonrisa en verano:

CEPILLO DE VIAJE

Disponer de un kit de viaje (cepillo, pasta e hilo dental) es la clave para mantener siempre las caries a raya, pero en verano, solemos movernos más, por lo que recomendamos llevarlo en el bolso o en el coche. De esta forma, no olvidarás cepillar tus dientes tres veces al día o al menos, por la noche, antes de dormir. Si no tienes el kit a mano, enjuaga tu boca con agua después de cada comida y toma chicle sin azúcar.

 Si tienes sensibilidad dental, por ejemplo, debes usar dentífricos y colutorios especiales para evitar malestar al consumir alimentos o bebidas frías. No dudes en consultarnos si tienes problemas al elegir tu pasta de dientes y colutorio dental. 

 Las altas temperaturas provocan sequedad en la boca, produciendo menos saliva y aumentando el riesgo de ataque de bacterias en tu boca. Por ello, es fundamental beber abundante agua por el bienestar de tu salud general y bucodental. Y, por último, aunque tengas muchísima sed, ¡NO MASTIQUES EL HIELO! Daña tus dientes y no sacia la sed.

Es normal que nos demos ciertos caprichos en vacaciones, pero intenta buscar alternativas de vez en cuando. Para estos momentos, intenta beber con pajita para evitar el desgaste del esmalte. Una alternativa a estos refrescos azucarados, muy refrescante, sería la fruta y zumos naturales de temporada, como la sandía o las fresas. Otra fruta a tener muy en cuenta es la manzana, ya que ayuda a tener unas encías y dientes sanos. Además, aunque no sea sustitutivo, si no puedes cepillar tus dientes, ésta te ayudará. Otro consejo útil, es evitar masticar lentamente los alimentos ácidos.

• Pescado y marisco: por su alto contenido en flúor, entre ellos la sardina, ayudan a prevenir las caries. Además, son ricos en hierro y magnesio para proteger tus encías.
• Pasta y pan de centeno: necesitan más tiempo de masticación, y por eso necesitan más saliva para quitar gérmenes y bacterias de la boca.
• Lácteos: además de su alto contenido en calcio, contrarresta los efectos de erosión del esmalte de alimentos ácidos.
• Rábanos, tomates y cerezas son ricos en flúor para reforzar el esmalte.
• Apio, manzana y zanahorias mantendrán tus dientes limpios
• Frutos del bosque: contienen sustancias antibacterianas capaces de disminuir la placa dental.
• Vino tinto, siempre con moderación, impide que las bacterias se peguen a la superficie dental.
• Wasabi: si, el wasabi ayuda a tus dientes contra la acción antibacteriana.

 El agua de las piscinas es tratada con productos químicos, como el cloro, que favorecen su salubridad. Pero estos productos tienen un ph superior al de nuestra saliva, lo que puede provocar que se formen manchas y sarro en la superficie de los dientes, porque las proteínas de la saliva se descomponen de manera más rápida. Para evitar esto, usa el flúor como medida de prevención. Si has notado que ya eres propenso/a a estas manchas o vas a acudir a la piscina a diario, consúltanos, porque a lo mejor necesitarás un protector bucal.